Protestas por alza de precios obligan a Evo a salir de Oruro

10 de febrero. Tres estudiantes, uno de ellos chipaya, desfilan ante el palco oficial.

El presidente Evo Morales Ayma tuvo que retirarse ayer de los actos de homenaje por los 230 años de la revolución orureña del 10 de febrero de 1871 debido a las protestas organizadas por la COD contra el alza de precios.

La marcha de la Central Obrera Departamental (COD), liderada por mineros y juntas de vecinos, llegó hasta la plaza 10 de Febrero donde se hicieron explotar al menos 12 cartuchos de dinamita. Los manifestantes protestaban contra el alza de los precios del transporte y los alimentos y contra la escasez de algunos víveres, particularmente el azúcar.

“No nos interesa llegar hasta donde está el Presidente, ésta es una protesta social pacífica”, dijo el secretario ejecutivo de la COD, Jaime Solares. Cuestionó la política económica del Gobierno y advirtió que “el modelo no sirve y trae hambre y miseria”.

La protesta se activó una hora después de que Morales participara de una ceremonia interreligiosa en la Gobernación que concluyó a las 8.45, donde se armó una mesa a la Pachamama y hubo una misa celebrada por pastores de la iglesia metodista y bautista.

Los marchistas hicieron explotar cartuchos de dinamita por su paso por la plaza 10 de Febrero. A las 10.10, Morales abandonó la Gobernación rumbo a La Paz. En una improvisada conferencia de prensa, el vocero presidencial Iván Canelas comunicó la determinación y dijo que fue por seguridad.

Morales debió participar el jueves del desfile cívico-militar organizado por la Gobernación. Para el acto llegaron el vicepresidente Álvaro García Linera, el gabinete de ministros, asambleístas nacionales y autoridades del Alto Mando Militar y Policial. También arribaron a Oruro los gobernadores de La Paz, César Cocarico; de Potosí, Félix Gonzales, y de Chuquisaca, Esteban Urquizu.

“Es lamentable (…) que se realicen estas manifestaciones con el estallido de dinamita y cohetes con el fin de provocar temor. El Gobierno no quiere responder a esta clase de protestas; por esa razón el Presidente y el Vicepresidente retornaron a La Paz”, justificó el vocero presidencial.

Lamentó que “grupos de dirigentes despistados y con un pasado ligado a los golpes de Estado” realicen manifestaciones de protesta, en alusión a Solares. Éste le pidió al vocero pruebas y señaló que el Presidente abandonó Oruro por “vergüenza”. “Si dice ser de izquierda, que abrogue el Decreto 21060, que cumpla con la agenda de Octubre”, demandó.

El dirigente aseveró que la decisión de marchar el 10 de febrero fue aprobada el martes pasado por las instituciones que conforman la COD. “El Gobierno sabía que íbamos a marchar. No hemos atacado a nadie, ha sido pacífica, no habido provocación y la dinamita no estaba dirigida a nadie ni al frontis de la Gobernación”, manifestó Solares.
Gobernador critica a la dirigencia

El gobernador de Oruro, Santos Tito, lamentó la protesta de la COD y ratificó que Morales tomó la decisión por seguridad. “Por seguridad principalmente, estaban haciendo explotar dinamita en varios sectores. Lamento que Jaime Solares haya querido entorpecer los 230 años que estamos cumpliendo hoy. Nuestro Presidente, como orureño, quería participar”, aseveró. Tito recibió el respaldo de sus homólogos de Chuquisaca y Potosí. “Lamentamos la actitud de algunas personas que quieren perjudicar”, manifestó el Gobernador chuquisaqueño.
La lluvia no opacó el civismo de orureños

Cerca de un centenar de instituciones, entre Fuerzas Armadas, Policía, jubilados, ex combatientes de la Guerra del Chaco, colegios, gremiales y otros, además de organizaciones sociales, rindieron ayer homenaje a los 230 años de la revolución del 10 de febrero de 1781. La lluvia no opacó los actos.

El gobernador de Oruro, Santos Tito, encabezó el acto cerca de las 11.00. Estuvo acompañado por la alcaldesa de Oruro, Rocío Pimentel, y los gobernadores de La Paz, Chuquisaca y Potosí.

Se apostó en uno de los balcones de la Gobernación y desde allí observó, acompañado de sus invitados, el paso de los asambleístas departamentales, miembros del grupo de comandos Delta vestidos de negro. El desfile quedó inaugurado.

Oruro inició el 29 de enero pasado los actos de homenaje por los 230 años de la revolución del 10 de febrero de 1871, día en que se recuerda la sublevación de Sebastián Pagador y pobladores de la entonces denominada Real Villa de San Felipe de Austria contra el dominio español, con un festival de la morenada en la avenida cívica.

El presidente Evo Morales debió participar del desfile, pero por motivos de seguridad retornó a La Paz tras las protestas de la COD de Oruro por la subida de los pasajes en el autotransporte y la escasez de alimentos.
Los actores
Zulma Yugar
‘Tendríamos que respetar fechas cívicas’

“Todos los orureños deberíamos estar rindiendo a nuestros próceres y comprometiéndonos para construir un mejor porvenir. La marcha (de la COR) está empañando un festejo donde todos los orureños hemos comulgado para crear un mejor futuro. Vivimos en libertad, vivimos en democracia; sin embargo, tendríamos que respetar fechas cívicas”.
Jaime Solares
‘El proceso de cambio ha traído hambre’

“El modelo y el proceso de cambio han traído hambre, miseria y desocupación. Necesitamos medidas revolucionarias (...), la expulsión de las transnacionales y de algunas empresas mineras que están ganando un montón de plata. Queremos que el Gobierno reconozca que hay conflictos sociales”.
Rocío Pimentel
‘Nunca le haríamos daño al Presidente’

“Todos los orureños lamentamos que estos desencuentros se produzcan en una fecha tan importante (...). Pero el presidente (Evo Morales) debió hacerle un homenaje a nuestra tierra. Nunca le haríamos daño al Presidente, pero sí hay desesperanza de los ciudadanos por el incremento en las tarifas del autotransporte”.

La Razón

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