Uno de cada cuatro hogares ofrece parte de su vivienda para alquilar a otros (Estudio)

Un reciente estudio del BID muestra que América Latina y el Caribe es una región de propietarios de viviendas, algo significativo si se considera que la población urbanizada supera el 80%. En Bolivia uno de cada cuatro hogares oferta su vivienda, parte de ella, en alquiler para recibir ingresos y rentas a otras personas que generalmente proceden de similar estrato social.

“El alquiler puede convertirse entonces en una alternativa eficiente y efectiva en función de los costos para resolver los problemas del déficit habitacional cuantitativo y cualitativo que actualmente afecta a casi el 40% de los hogares de la región”, dice el informe “Se busca vivienda en alquiler - Opciones de política en América Latina y el Caribe”, en el que los hogares bolivianos ingresan en un perfil similar al de Ecuador y Honduras.

El perfil de la oferta de la vivienda en alquiler “es diversa, privada y en pequeña escala, y en su mayoría está representada por propietarios individuales que comparten la misma extracción social que sus inquilinos”. Frente a este panorama el informe propone que el sector necesita “mayor dinamismo” para no sólo aumentar la oferta sino además ayudar a los propietarios-arrendadores a mejorar sus ingresos.

La vivienda en alquiler no necesariamente es una opción para los más pobres, lo que se explica porque la informalidad de acceso a una vivienda permite a hogares de escasos ingresos acceder a una casa en propiedad aunque ésta no tenga la calidad y ubicación adecuadas. En este caso también existe la demanda porque predomina en algunos grupos más dinámicos como los jóvenes, los hogares unipersonales y los divorciados.

Mientras la tasa de propiedad de la vivienda está en 64% en América Latina y el Caribe, Bolivia tiene el registro mínimo de 50% (en este aspecto se parece a Suiza, Colombia y Alemania) de propietarios mientras que Venezuela tiene el máximo con 86%. Eso implica que el nivel de propiedad no aumenta con el grado de desarrollo de un país, y tampoco tiene que ver con el incremento de su población.

En las principales ciudades de la región la incidencia del alquiler es más alta. En una mirada a 42 ciudades seleccionadas, por tener poblaciones superiores a un millón de habitantes, el promedio de hogares que vive en alquiler es de 22%. La ciudad de La Paz está por debajo de ese promedio (con un 20%), y la ciudad de Santa Cruz de la Sierra se acerca al 30%.

Si se toma en cuenta la edad, el grupo de 15 a 24 años es proclive a alquilar entre 5 y 14 más veces que el grupo de 65 años o más. La tendencia a alquilar entre los viudos es menor, mientras que entre los divorciados es mayor. El nivel educativo no parece pesar o tener efecto en la decisión de tenencia, pero el tipo de empleo sí podría influir al mostrar que los trabajadores asalariados tienen una mayor probabilidad de alquilar que cualquiera de los otros grupos.

Mercado inmobiliario en el país
El mercado inmobiliario es también un aspecto fuertemente dinamizado en los últimos años en el país. La investigación “El mercado inmobiliario en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz” (2013), realizada por Alberto Rivera Pizarro, muestra, en un seguimiento a 14 publicaciones de domingos de avisos clasificados en periódicos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, una oferta de más de 1,5 billones de dólares en el mercado inmobiliario. Este aspecto expresa, dice el autor, la “capacidad para generar capital sobre el suelo casi sin trabajar” y casi “como un monopolio empresarial”.

El estudio consideró 8.335 datos limpios, es decir avisos que contenían información requerida (precio, metros, metros cuadraros y ubicación del inmueble); se desecharon cerca de cuatro mil avisos por insuficiente información y se filtraron los avisos repetidos. La aclaración necesaria del autor es que la dimensión del movimiento económico real es mayor a los 1,5 billones de dólares registrados, puesto que los avisos de prensa “son apenas una parte” del mercado de suelos en general, pues los propietarios tienen formas alternativas de negociar sus bienes.// PIEB (BO)

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